Juego solitario, en el que la interacción está en el tablero sin escalar por número (a dos jugadores pueden ni tocarse, como fue el caso), y al comprar cartas en un mercado de 9… Osea, un juego solitario en línea al Newton.
El puzzle mental, la chicha del juego, es cómo vas bajando cartas y cumpliendo objetivos. Como bien dijo el dueño y explicador, el juego se parece muchísimo al Grand Austria Hotel: fase de coger objetivos e intentar cumplirlos en cada ronda.
Bastante variabilidad gracias a cierto azar en los descubrimientos, en el orden de las cartas y que cuando vas a explorar vas a perder un trabajador al azar.
Jugado a dos se fue a dos horas en primera partida, y es que no tiene rondas fijas, sino depende del ritmo de compra de cartas del mercado. en una ronda no compramos ninguna, por ejemplo.
El juego genera AP relativo, tu con tu puzzle, y pasando casi de los demás, y coincidir en la fase de compra de cartas.
Me dejó las mismas sensaciones que el Newton. A mi me gustan ambos, son puzzles solitarios con pinceladas de interacción. El puzzle merece la pena, la partida me duró lo que querría. La contrapartida es que a más de dos mejorará la interacción en tablero pero ¿a costa de qué?
Los juegos tan solitarios implican que muchas veces juegas a tu bola y coincides cuando toque. En Newton hecho de menos no jugar todos a la vez (no se puede por el mercado de cartas o al recoger tokens de los mapas) y en este Blackout han reunido las fases comunes en el mismo momento, de tal forma que es como si sales de senderismo y dices al otro, nos vemos en el pico de la montaña. Lo mismo te toca esperar a ti o a él un poco. A tres espero que no se alargue, aunque tengo dudas que mejore.
A mi me ha gustado, nunca será un sobresaliente, pero es un puzzle edificante y solitario. La opinión es con sólo una partida.